En una tarde complicada para Cristian Romero, quien anotó un gol en su propia portería y cometió una falta que resultó en un penalti, Bukayo Saka y Heung-min Son brillaron con sus goles, ofreciendo un empate 2-2 en el derbi del Norte de Londres entre Arsenal y Tottenham. El resultado no satisfizo a ninguno de los equipos, pero destacó la fuerza de ambos conjuntos.
El doblete de Son y el gol de Saka, quien además provocó el autogol de Romero con un disparo, sellaron el empate en un enfrentamiento en el que el Arsenal, dirigido por Mikel Arteta, partía como favorito. Sin embargo, se encontraron con un Tottenham bien organizado que supo aprovechar sus oportunidades.
A pesar de que los ‘Spurs’ comenzaron con un gol anulado de Son por fuera de juego claro, el Arsenal tomó el control y generó las primeras oportunidades. Primero, Gabriel Jesús intentó una volea que Vicario despejó brillantemente y luego Nketiah tuvo un mano a mano, tras una pérdida de Udogie, pero su disparo fue detenido por el portero rival.
Con el dominio de los ‘Gunners’, era cuestión de tiempo antes de que el Tottenham cediera, y así sucedió en una jugada característica de Saka. El inglés hizo un recorte hacia el interior, disparó al palo largo y Romero intentó despejar, pero desafortunadamente cambió la trayectoria de la pelota y la envió al fondo de la roja.
El viejo Tottenham parecía volver, el equipo que a veces parece estar maldito, hasta que sus dos mejores jugadores se combinaron. Después de que David Raya, ya establecido como titular, realizó una espectacular parada, una de las mejores de la temporada, ante Brennan Johnson, Maddison avanzó por la línea de fondo, dejando atrás a Saka, y entregó un pase atrás que Son empujó al gol entre tres defensores.
El empate fue un premio justo para los ‘Spurs’, quienes al comienzo de la segunda mitad cometieron un error nuevamente, con Romero como protagonista. El argentino desvió un disparo con la mano dentro del área, lo que llevó al VAR a señalar un penalti. Saka, quien ha tenido un historial irregular en lanzamientos desde el punto de penalti, no falló desde los once metros.
Esta fue la plataforma perfecta para que el Arsenal sentenciara, pero no tuvo tiempo ni para similar el 2-1. Justo después de sacar desde el centro del campo, Havertz se despistó, perdió la pelota y permitió que Maddison y Son se conectaran una vez más. Los mismos roles se repitieron; Maddison llevó la pelota y dejó a Son en una posición inmejorable para marcar. Sin Harry Kane, el surcoreano finalmente encontró a su compañero ideal.
A pesar de los diez minutos de tiempo extra y algunos disparos peligrosos de Saka, el Tottenham quedó satisfecho con el empate y logró mantener el resultado. El Manchester City sonríe, ya que ahora tiene cuatro puntos de ventaja sobre sus dos principales perseguidores. También esbozan una sonrisa los ‘Spurs’, que pasaron de perder este duelo el año pasado a competir en él y llevarse un punto.
